Las mujeres migrantes, al encontrarse solas en un país nuevo, son más vulnerables y corren el riesgo de servíctimas de violencia, robos y trata de personas. Debido al éxodo se han registrado diversos casos de venezolanas que han sido violentadas física y emocionalmente. Durante los primeros seis meses de este año, al menos 233 venezolanas han sido rescatadas de grupos de tráfico de personas y explotación sexual, una situación que se ha incrementado debido a la crisis sanitaria por la pandemia del COVID-19. Desde 2018 las organizaciones Éxodo, Mulier e Hias han registrado casos de trata y violencia hacia migrantes venezolanas en países como Perú, Colombia, España, Panamá, Ecuador, República Dominicana, México, Austria, Guyana, Chile, Venezuela y Trinidad y Tobago. Uno de los casos más recientes de violencia contra venezolanas migrantes es el caso de Johanna Díaz y de la modelo Stefany Flores. Sin embargo, estos no han sido los únicos eventos de violencia física o sexual. El Pitazo recoge nueve casos de violencia ocurridos desde finales de 2019 hasta septiembre de 2020.