Venezuela, un país con las mayores reservas de petróleo del mundo que en su día fue el más rico de Sudamérica, se enfrenta ahora a una aguda crisis económica y humanitaria que lleva años acumulándose. La encuesta nacional sobre las condiciones de vida en Venezuela del año pasado, conocida por sus siglas Encovi, muestra que 94,5 % de la población vive en la pobreza y más de tres cuartos en la pobreza extrema. Desde el 2015, una quinta parte de la población ha abandonado el país, lo que convierte a Venezuela en una de las mayores crisis de desplazamiento del mundo, según la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados, no muy lejos de Siria, aunque la invasión de Rusia a Ucrania pudiera cambiar pronto esa relación. Colombia ha sido generosa con los migrantes venezolanos, proporcionándoles mucho más que la ayuda informal ofrecida en Pamplona. El país acoge a más de 1,8 millones de venezolanos, es decir, cerca de 32 % de todos los migrantes venezolanos en América Latina, según el Banco Mundial.