En La Parada, Villa del Rosario, cualquier espacio es un hostal para descansar a cualquier hora del día.
Los techos no siempre son de concreto, algunos duermen bajo ‘techos’ de árboles y otros a cielo abierto en donde los coja la noche. Para algunos, sus preocupaciones se centran en la búsqueda de los tres ‘toques’ diarios bajo un sol ardiente en una tierra cercana a la suya.