Las familias de los desaparecidos piden al Gobierno de Venezuela una investigación regional, que involucre a Colombia y a Nicaragua, que logre dar con el paradero de estas personas. Son al menos 40 los desaparecidos, entre los que se contabilizan 13 menores de edad. Todos abordaron la misma lancha operada por coyotes o grupos irregulares que cobraron entre 700 y mil 250 dólares a cada migrante.
“En Colombia nos venden la teoría de que fue un naufragio, pero es falso”, afirma confiada Dilibeth Guevara, hermana de una de las victimas y tía de dos menores de edad desaparecidos. “Están secuestrados o en cautiverio”. Estas familias están convencidas de que no fue un naufragio. La hipótesis que consideran cobra más fuerza es el cautiverio o tráfico de migrantes.
“El naufragio te deja elementos como cuerpos, bolso, cualquier tipo de rastro, hasta el momento no hemos conseguido rastro, no se encontraron cuerpos de desaparecidos, ni tampoco restos de la lancha, solo ocho pasaportes que aparecieron en Costa Rica”, sigue Guevara.
Los horarios de conexión en Whatsapp de algunos de los desaparecidos se actualizaron, al igual que los perfiles en redes sociales como TikTok y Facebook, luego del 21 de octubre, afirman.