El Sistema de Alertas Tempranas de la Defensoría del Pueblo reveló “un panorama de riesgo, amenaza e inseguridad” para las personas que ejercen liderazgos sociales o se dedican a la protección de los derechos humanos. La coyuntura descrita por la Defensoría se sustenta en que el año pasado, entre enero y diciembre, fueron asesinados 181 líderes, lideresas y personas defensoras de derechos humanos en Colombia. De ese total, 160 fueron hombres y 21, mujeres. Esos 181 crímenes sucedieron en 123 municipios repartidos en 25 departamentos. El 44% del total se concentró en ochenta de esos municipios. Cauca, con 36 casos; Antioquia, con 21, y Nariño, con 17, fueron los departamentos en los que más se presentaron asesinatos. Los cálculos de la entidad indican que, en promedio, cada dos días fue asesinado un o una líder social. “Cada vida perdida es una tragedia para sus familias, las comunidades y la defensa de los derechos fundamentales”, expresó el defensor del pueblo, Carlos Camargo.