Una investigación liderada por la Fiscalía General de la Nación, en articulación con la DIJIN de la Policía Nacional y la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos se impactó el componente estructural y el patrimonio de una red delincuencial señalada de transportar ilegalmente migrantes durante el último año. La organización sería la responsable de mover ciudadanos africanos, asiáticos, cubanos, haitianos y venezolanos que ingresaban irregularmente al país. “Ingresaban desde Ipiales, Nariño y Cúcuta, Norte de Santander hasta Necoclí, Antioquia; y desde zonas limítrofes con Venezuela hasta puntos limítrofes con Ecuador. Los traslados se realizaban en buses pertenecientes al grupo ilegal y con el acompañamiento de motociclistas que brindaban seguridad y alertaban sobre la presencia de las autoridades en la vía” aseguró Ricardo Romero Moreno, delegado contra la Criminalidad Organizada de la Fiscalía.