La migración a través del Darién es una situación imparable. Cada día, centenares de migrantes provenientes de naciones cercanas como Venezuela, Haití, Ecuador, Chile y Brasil, así como de lugares lejanos como China, India, Afganistán, Camerún, Somalia y Bangladesh, cruzan el Tapón del Darién, poniendo en riesgo su vida: a las complejas condiciones naturales que presenta la selva se le añade la presencia de grupos criminales locales que roban, secuestran y ejercen violencia sexual. Las situaciones inhumanas que han vivido los casi 500 mil migrantes que han cruzado la selva del Darién en 2023 resulta estremecedor. Las vulnerabilidades se suman y multiplican, y siguen encontrando una respuesta insuficiente e inadecuada. Cada nuevo año se vuelve a batir el récord, pero la respuesta sigue siendo la desprotección. En todo 2022 fueron 248.000 personas migrantes, y en 2021, 133.000.