Países en Latinoamérica y El Caribe han recibido a apróximadamente 3.5 millones de 4.5 millones de venezolanos migrantes y refugiados al rededor del mundo, mientras los 800 mil restantes se han mudado a otras regiones al rededor del mundo. Niños y sus familias enfrentan retos para regularizar su estatus migratorio, lo cual afecta su acceso a la protección social, salud, desarrollo de la primera infancia, educación, desarrollo sustentable y protección de los niños. La falta de políticas públicas comprensivas sobre asuntos migratorios en comunidades receptoras está poniendo a los niños en alto riesgo de ser discriminados, víctimas de violencia, xenofobia, explotación y abuso en los países de tránsito y destino.