Un hotel de Manhattan que fue adaptado como albergue está a punto de cerrar luego de convertirse en un emblema del complicado esfuerzo de la Ciudad de Nueva York para gestionar un aumento de migrantes internacionales.
El alcalde Eric Adams dijo esta semana que el Hotel Roosevelt y más de 50 otros refugios para migrantes ya no son necesarios y cerrarán a más tardar en junio. Las llegadas han caído drásticamente en los últimos siete meses, y la ciudad ha trasladado a muchos migrantes a otras viviendas y comunidades, afirmó.
El cierre también se produce en momentos en que el gobierno del presidente Donald Trump adopta una línea dura en materia de inmigración y critica los hoteles refugio de la Ciudad de Nueva York y al Roosevelt en particular.
Las llegadas de migrantes han caído a un promedio de aproximadamente 350 por semana en la ciudad, y la población de refugios para migrantes ha disminuido de 69.000 hace aproximadamente un año a menos de 45.000 ahora, dijo Adams el lunes.