Casi la mitad de la población de Tibú, el municipio con más coca sembrada en Colombia, es migrante venezolana. Muchos de ellos, acorralados por el hambre, la necesidad y los grupos armados de la región; trabajan de recolectando hoja de coca. No están en la agenda de ningún gobierno, no le preocupan a nadie. El Espectador estuvo en esa región del Catatumbo para contar a través de Jennifer, Alex y Pacho, cómo sobreviven con el doble estigma de ser migrantes y raspachines.
Migrantes en el Catatumbo: raspar coca mientras se araña la vida