En menos de 24 horas se ha registrado en Colombia una escalada de violencia que produjo la muerte de más de veinte personas y ha puesto en riesgo de desplazamiento a más de 2.000 habitantes de varios municipios del departamento del Arauca. El Ejército de ese país atribuyó la situación al enfrentamiento entre grupos armados por el “control de las economías ilícitas”. En un comunicado del Comando de la Fuerza de Tarea Quirón, perteneciente a la Octava División del Ejército, se informó sobre “una serie de homicidios” en los municipios de Saravena, Arauquita y Fortul, que serían producto de combates entre integrantes del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). El Comando adelantó que “se llevó a cabo un Consejo de Seguridad” con “todas las autoridades civiles y militares”, y los alcaldes de los municipios de Tame y Saravena. “Toda la institucionalidad se ha reunido para desarrollar la acción unificada y poder llegar a estos puntos retirados del departamento”, dice el texto.