Cuando recién se cumplieron cinco años del cierre de la frontera colombo-venezolana, la gobernadora del estado, Laidy Gómez, manifestó sus impresiones sobre el suceso y alegó que esta medida solo ha beneficiado a las personas que ejercen actividades irregulares en las denominadas trochas. “Con el cierre fronterizo se generó trabajo para irregulares, guerrilleros y ‘trocheros’. Se debilitó el aparato productivo y se arruinó el patrimonio comercial tachirense”, manifestó. Igualmente, habló sobre lo que califica como calamidades para el pueblo fronterizo y para Venezuela, sobre todo en lo monetario, aludiendo que se ha debilitado el aparato económico del país. Calificó como una “decisión unilateral” el cierre fronterizo, responsabilizando al presidente de la República, Nicolás Maduro, como actor principal de ello, e incluso acotó que contó con la complicidad del exgobernador José Gregorio Vielma Mora.