El trabajo informal en Villa del Rosario, específicamente en La Parada, se ha convertido en el dolor de cabeza de la administración municipal. Pasaron de tener en agosto del año pasado unos 150 comerciantes informales, a tener para la fecha cerca de los 2.500. En La Parada el 80 por ciento de los vendedores informales son venezolanos sumándole un ingrediente adicional al problema de la informalidad, y es que la mayoría no posee la documentación reglamentaria para estar dentro del país, y menos para trabajar formalmente.