El arribo de migrantes y refugiados venezolanos a Colombia “no para” y al menos 327.000 niños en el país vecino necesitan ayuda humanitaria, advierte Unicef, que lanzó un llamamiento para aumentar la ayuda internacional. “El ritmo de llegadas sigue creciendo de forma estable, no para (…) Las necesidades están creciendo a un ritmo exponencial”, dijo el lunes a la AFP Paloma Escudero, directora de Comunicaciones del Fondo de la ONU para la Infancia, que acaba de pasar varios días en la ciudad colombiana de Cúcuta, en la frontera con Venezuela.