Empresarios de Ureña, capital industrial del estado Táchira, viajaron a San Cristóbal para hacer un llamado a los gobiernos regional, nacional y a la Corporación Eléctrica, a raíz de los cortes no programados que están afectando la producción y la vida cotidiana de los residentes, ya que la mano de obra calificada vuelve a migrar a Colombia. Gregorio Benítez, vicepresidente de la Cámara de Industria y Comercio de Ureña, explicó que la mano de obra calificada está saliendo ante la imposibilidad de trabajar sin electricidad en los municipios fronterizos, pero muchas veces del lado colombiano son reclutados por grupos irregulares. “Los cortes de electricidad se están convirtiendo en un problema social agudo, en Ureña Estamos teniendo cortes de 7 horas, 8 y 9 horas diarias, cuando no tenemos electricidad durante el día, debemos trabajar de noche”, dijo Benítez.  En esta localidad fronteriza hay más de 1.000 industriales que generan más de 7.000 empleos directos y se encuentran gravemente afectados. Sin embargo, los empresarios expresaron que no se dan por vencidos y se aferran a seguir produciendo, pero requieren de la mano amiga del gobierno y de Corpoelec.

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