Desde el recrudecimiento del conflicto en el Catatumbo, tras la reanudación de enfrentamientos entre el Ejército de Liberación Nacional (Eln) y las disidencias de las Farc, Cúcuta ha recibido a más de 30.000 personas víctimas de desplazamiento forzado.
La crisis humanitaria ha generado una alta demanda de refugio y asistencia para estas familias que han tenido que abandonar sus hogares debido a la violencia.
La mayoría de los desplazados han encontrado acogida en casas de familiares, sin embargo, un número significativo ha tenido que recurrir a los albergues temporales habilitados por la administración municipal.
Hasta la fecha, se han instalado tres refugios donde permanecen 506 personas en carpas acondicionadas como hogares de paso.
Debido al constante flujo de desplazados y a la limitación de recursos municipales para cubrir los gastos de hospedaje en hoteles o posadas, la Alcaldía trabaja en la adecuación de un cuarto albergue.