Una orden judicial detuvo la deportación de otros cuatro venezolanos, una madre y sus tres hijos, parte de la veintena de personas de esa nacionalidad, incluidos 16 menores, detenidas la semana pasada, inicialmente deportadas de Trinidad y Tobago y que permanecieron casi dos días en el mar antes de regresar al país caribeño. La jueza Avason Quinlan-Williams dictó este domingo 29-N una orden que impide al Estado deportar a la familia que regresó entre la veintena de venezolanos a la isla de Trinidad el martes después de que fueron “escoltados”, según la terminología de las autoridades del país caribeño, fuera de las aguas territoriales de Trinidad y Tobago. La orden judicial determinó además que a la madre se le permitirá utilizar un teléfono celular para comunicarse con sus familiares y abogados.