Según el director del Servicio Jesuita a Refugiados de Venezuela (SJR) Eduardo Soto, la declaratoria de cuarentena en todo el territorio nacional ha afectado la situación de las personas que van hacia Colombia y se regresan a Venezuela “muchos de ellos no tienen un lugar para resguardarse y cumplir con esta medida”. Soto asegura que el contexto que se vive en las fronteras es frágil pues no se cuenta con un servicio de salud adecuado, tampoco existe un sistema de transporte apropiado en caso de hacer frente a cualquier emergencia. El también sacerdote jesuita cuenta que desde el SJR han venido acompañando a los migrantes pendulares: “Ellos hacen su vida en la frontera y obviamente con esta declaratoria de cuarentena esa situación se ha afectado mucho. Lo que más nos preocupa es que muchos de ellos no tienen hogar, no tienen un lugar para resguardarse y así cumplir con la medida de aislamiento”