Decenas de venezolanos, algunos de ellos devueltos desde Estados Unidos, hacían fila este martes al exterior de la Comar, cubiertos con ropa gruesa y cobijas por la fría mañana. A la par de las nuevas políticas de Estados Unidos, México aceptó recibir, por motivos humanitarios, a los venezolanos que busquen cruzar por tierra y ahora se prepara para otorgarles refugio a quienes lo soliciten. Según las nuevas directivas de Estados Unidos, se recibirá a 24.000 venezolanos, pero aquellos que hayan ingresado ilegalmente a México o a Panamá no podrán aspirar a este beneficio. Andrés Ramírez, coordinador general de la Comar, dijo a la televisora Milenio que este año esperan tener 10.000 solicitudes, lo que será un máximo histórico. Eduardo Rodríguez, venezolano de 43 años que reside en México desde 2011, llegó hasta la Comar para llevarles ropa a sus compatriotas, a quienes alienta a permanecer en este país.