El regreso de las clases presenciales en los centros educativos en zonas indígenas está lejos de estar a la par de algunas escuelas o liceos en las capitales del país. Sin docentes y con escuelas cuyas estructuras están colapsadas pone en grave riesgo un año escolar sitiado por los efectos de la pandemia. En Delta Amacuro, uno de los estados con la segunda mayor población indígena en Venezuela, las escuelas se encuentran en graves condiciones. El estado Amazonas también presenta una grave crisis en los centros educativos, las escueles no cuentan con pizarras ni pupitres. El personal docente, obrero y administrativo han abandonado los planteles. En el municipio Guajira, al norte del estado Zulia, la realidad no es distinta. Radio Fe y Alegría Noticias pudo confirmar que en el primer día de clases presenciales las escuelas públicas se encontraban «desoladas». Es decir, sin estudiantes ni maestros. Las comunidades indígenas del estado Apure también sufren de abandono por parte de las autoridades en esta materia.