Mientras en Cúcuta cada vez se restringe la venta de la harina de maíz, en el Táchira las pacas de Harina Pan, por sus altos costos permanece en los estantes vendiéndose poco a poco mientras la gente va guardando lo suficiente para adquirir así sea un paquetico, o desaparece por ensalmo ante el rumor de una nueva alza. Hoy los supermercados en Cúcuta ante la avalancha de compradores venezolanos, han decidido que solo venderán un número limitado de harina de maíz, algo que solo había ocurrido en Venezuela, donde la carestía y el bachaquerismo hicieron de las suyas.