La ONG Unión Panamericana y del Caribe por los Derechos Humanos (Pacuhr, por sus siglas en inglés) expresó a través de un comunicado su “profunda preocupación” por el impacto de las medidas tomadas por los gobiernos de Aruba y Curazao, especialmente en materia de deportación y detención de migrantes venezolanos. “Nuestra preocupación se centra en la apertura de las fronteras de Aruba y Curazao con Venezuela y que esto pudiese generar aprehensiones masivas y expulsiones de venezolanos en situación migratoria irregular, constituyendo una inobservancia del ordenamiento jurídico internacional”, señaló Pacuhr, federación que dice agrupar a más de 89 organizaciones de la sociedad civil en las Américas, el Caribe y Europa. La organización hizo referencia a una redada que ejecutó el gobierno de Curazao el viernes 14 de abril, y que concluyó con la detención de 18 mujeres. “No todas son venezolanas, pero seis de ellas, según comunicado de prensa, quedaron bajo privación de libertad para ser deportada”. En este sentido, reiteramos que se deben respetar las garantías jurídicas y brindar un tratamiento digno y justo a las mismas».