Un total de 634 personas migrantes murieron en las rutas de Centro y Sur América y el Caribe, situándose como la cifra más alta registrada por la OIM en el ultimo sexenio. En el Caribe se registraron 154 muertes, un considerable aumento si se compara con las 28 ocurridas en 2018. Según Millman, portavoz de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), este aumento se explica “con una sola palabra que empieza por V: Venezuela”. El portavoz indicó que hay más de cuatro millones de venezolanos recorriendo las rutas migratorias de América Latina y el Caribe, y ello se traduce en un repunte en el número de víctimas mortales.