La pandemia de la COVID-19 llegó a Venezuela a mediados de marzo. El número de casos se mantuvo relativamente bajo en los primeros tres meses, pero recientemente ha habido un aumento significativo de casos. Las prolongadas medidas de confinamiento y cuarentena han afectado gravemente a la economía del país y a los medios de vida de la gente, y han exacerbado las necesidades humanitarias existentes. Un reto adicional para el país ha sido el regreso de decenas de miles de venezolanos que han perdido sus empleos en los países vecinos debido a las medidas de confinamiento relacionadas con la COVID-19. Desde el 6 de abril, según las cifras oficiales, más de 74.000 personas han regresado a Venezuela. Las organizaciones humanitarias prestan asistencia a los repatriados en refugios temporales administrados por las autoridades. Las organizaciones humanitarias están intensificando sus esfuerzos de respuesta en atención de la salud y otros sectores, como agua, saneamiento e higiene, seguridad alimentaria, nutrición, protección, alojamiento y educación.