La noticia del descuartizamiento de dos ciudadanos en Perú presuntamente a manos de venezolanos, entre ellos dos mujeres, ha ocupado buena parte de la prensa latinoamericana, no solo por lo cruel del crimen, sino porque actos como ese atizan el rechazo creciente hacia los cada vez más migrantes que huyen de la crisis de Venezuela. La prensa peruana quiso profundizar e ir más allá del registro noticioso. Acudió entonces a unos de los investigadores más acuciosos y productivos en los estudios de violencia en América Latina, el sociólogo Roberto Briceño-León, director del Observatorio Venezolano de Violencia (OVV) y del Laboratorio de Ciencias Sociales (LACSO).