Fuerzas de seguridad españolas e italianas liberaron a doce mujeres víctimas de explotación sexual, principalmente de Venezuela y Colombia, y detuvieron a otras quince personas durante los registros de seis domicilios en Roma y en la localidad española de Baracaldo (norte). La Guardia Civil española informó este martes que los responsables de la organización estaban afincados en Baracaldo, en la provincia de Vizcaya, desde donde dirigían las actividades.