El ingreso de los niños venezolanos a los colegios públicos en Bogotá no ha sido fácil. A pesar de que la administración ha abierto las puertas para que los menores tengan un cupo en las instituciones distritales, hay factores culturales, sociales y educativos que afectan su formación. Por un lado, están los casos de xenofobia que muchas veces degeneran en manoteo. Por el otro, factores que la Secretaría de Educación ha detectado y que están relacionados con los bajos niveles educativos de quienes están llegando del vecino país.