Unos 5,4 millones de migrantes y refugiados han huido de Venezuela, según las cifras presentadas este martes por la Organización de Estados Americanos (OEA), que recoge una “profundización” de la crisis en Venezuela y destaca que “el cierre de fronteras durante la emergencia por la COVID-19” ha obligado a los venezolanos a utilizar “caminos irregulares” para salir del país, muchos de ellos peligrosos. Los que dejan Venezuela se ven obligados a utilizar vías alternativas, como “trochas o “rutas marítimas peligrosas”, algo que aumenta “su condición de vulnerabilidad”, señala un informe publicado este martes por el organismo. Según las cifras del informe, aunque hasta el momento han vuelto a Venezuela 130.000 personas, la reapertura económica de los países latinoamericanos ha ralentizado el flujo de retorno, y, de hecho, ha aumentado las cifras de nacionales que abandonan el país. Unos 500 venezolanos cruzan diariamente hacia el país vecino, Colombia, por caminos irregulares, ya que los pasos fronterizos entre ambos países permanecen cerrados.