La Diócesis San Marcos de Arica, Chile, manifestó su preocupación por las condiciones humanitarias de cientos de personas, en su mayoría venezolanos, que permanecen en el paso fronterizo de Chile y Perú, llamado Chacalluta. Desde el sábado 22 de junio, se exige ingresar a Chile con un pasaporte visado, más la acreditación de solvencia económica que financia la estadía, una carta de invitación o la reserva de un hotel.