La oleada violenta que se vive en la frontera que comunica a Puerto Santander y el corregimiento Aguaclara con Venezuela, desencadenó en el hallazgo de tres cadáveres en territorio colombiano. En los dos hechos (aislados) hay en común que, al parecer, los crímenes se registraron en suelo extranjero y posteriormente fueron abandonados en Norte de Santander, para que las autoridades adelanten los levantamientos.