El macabro hallazgo de cuatro cuerpos con signos de tortura en las zonas rural y urbana de Cúcuta avivó durante esta semana el terror de la oscura época de la violencia paramilitar, que a finales del siglo pasado dejó una estela de muerte y destrucción en esta zona de frontera con Venezuela. Las primeras tres víctimas, entre ellas una mujer en estado de embarazo, fueron encontradas el fin de semana en un paraje alejado entre los corregimientos de San Faustino y Ricaurte, en un sector colindante con el Estado Táchira.