40% de los migrantes son cabeza de hogar, ya sean madres, o padres; y sus hijos, quedan al cuidado de los abuelos y, en otros casos más extremos, de hermanos mayores. “Esto vulnera a la familia en Venezuela. Y cuando la familia se vulnera en Venezuela, eso aumenta la brecha de la pobreza”, acota la presidenta de la Comisión de Familia de la AN, la diputada Mariela Magallanes, La separación familiar, según Magallanes, también ha afectado la mente de los venezolanos. “La depresión, las enfermedades silenciosas, los suicidios han ido en aumento”, aseguró la diputada.