A punto de cumplirse un mes de la desaparición de la joven tachirense Kelly Zambrano, de quien no se sabe nada desde el 16 de mayo, cuando por última vez se comunicó con su madre para informarle que estaba por subir a la embarcación que la llevaría a Trinidad y Tobago, hoy su familia reclama mayor atención e interés por parte del Estado venezolano para recuperarla, pues se presume que ella y otras mujeres connacionales con las que viajó ese día, están siendo víctimas de trata de blanca en ese país.