El terror y la muerte volvieron a asomarse a las trochas, en la frontera. Los contrabandistas, que no paran de pasar mercancía de lado y lado entre Colombia y Venezuela, auguran malos tiempos, pero no pueden dejar de hacerlo porque de ello depende el sustento diario para sus familias. Dos escenarios con tres cadáveres fue el saldo que quedó este martes en las trochas conocidas como El Águila (Boconó) y La Playita (La Parada). Por razones humanitarias, las autoridades colombianas practicaron los levantamientos de los cuerpos que estaban en territorio venezolano y posteriormente fueron trasladados a la morgue del Instituto de Medicina Legal en Cúcuta.