El colegio Sagrado Corazón le está apostando a la integración por medio de las artes. Los jóvenes del Colegio conformaron la orquesta sinfónica y el coro para desde las artes enseñar la inclusión en el colegio. Son las 3:30 de la tarde y por los ventanales del segundo piso de la Institución Educativa Sagrado Corazón de Jesús se escucha la trompeta, color cobrizo, que toca David Emanuel Antequera, venezolano, de 17 años. Suena ‘Bésame mucho’, de la compositora mexicana Consuelito Velázquez, estrenada en 1940, y él y sus compañeros de estudios la ensayan con una pasión única. Se detiene el sonido de la trompeta y sus compañeros prosiguen en el ritmo y con la dirección del profesor Juan Toscano, terminan la pieza musical. Las manos del ‘profe’, como le llaman los chicos, marcan el tiempo de los instrumentos de viento, percusión y cuerdas. Son 30 jóvenes los que se compaginan a la perfección para que cada nota musical suene hermosa y la interpretación resuene por todo el colegio. Este grupo de chicos forma parte de la Orquesta Sinfónica de la institución, creada hace 4 años y que está integrada en su totalidad por alumnos del bachillerato, quienes en horas la mañana van a clases y en las tardes asisten a su proceso de formación musical.