Desde el año pasado el número de venezolanos que ingresaron al país aumento. Refugiados y migrantes comenzaron a ocupar edificios públicos abandonados en Roraima, un fenómeno que ahora se ha expandido. Con la capacidad de los albergues al máximo, es una alternativa a vivir en las calles en mitad de la temporada de lluvias. Se estima que casi 40.000 venezolanos viven en Boa Vista, lo que corresponde a más del 10% de los habitantes de la ciudad, 375.000.