El Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de Estados Unidos confirmó el sábado 26 que separó a una niña venezolana de dos años de sus padres, bajo el alegato de que ambos progenitores son miembros de la banda delictiva Tren de Aragua, designada como organización terrorista por Washington.
Según una respuesta del DHS, «el padre del menor, Maiker Espinoza-Escalona, es teniente del Tren de Aragua y supervisa homicidios, venta de drogas, secuestros, extorsión, tráfico sexual y opera una casa de tortura. La madre de la niña, Yorely Escarleth Bernal Inciarte, supervisa el reclutamiento de mujeres jóvenes para el narcotráfico y la prostitución».
Ambos padres, de acuerdo con las autoridades estadounidenses, ingresaron ilegalmente al país y tenían órdenes judiciales definitivas de deportación.
El DHS también explicó que «en colaboración con el Departamento de Salud y Servicios Humanos, el menor fue excluido de la lista de vuelo de deportación. Permanece bajo el cuidado y la custodia de la Oficina de Reubicación de Refugiados y actualmente se encuentra con una familia de acogida».
Estas declaraciones surgen en respuesta a la acusación realizada por el ministro de Interior, Diosdado Cabello, quien denunció que Estados Unidos «se está robando niños venezolanos migrantes».