Más de 61 mil niños y adolescentes venezolanos se han vacunado en el Norte de Santander, debido a la desconfianza que le genera a las madres la vacuna cubana que se aplica en los puestos de vacunación de la región tachirense. La desconfianza y la conveniencia son los dos factores que han obligado a las madres del Táchira a viajar hasta Cúcuta para vacunar a sus hijos contra la covid y el resto de enfermedades inmunoprevenibles que se combaten con las dosis establecidas en el esquema de vacunación venezolano. Si bien Táchira cuenta con las vacunas Abdala y Soberana, de origen cubano para la vacunación de niños y adolescentes en edades comprendidas de 3 a 17 años, un grupo importante de madres y representantes prefieren llegar hasta Cúcuta, Colombia, para vacunar a sus hijos con las dosis de vacunas anticovid que se aplican en esta localidad, por resultarles más confiables.