Cientos de venezolanos que emigran diariamente de manera forzada de Venezuela hacia territorio colombiano por la frontera San Antonio del Táchira- Cúcuta continúan su recorrido. Caminan desde Cúcuta 238 kilómetros para llegar a Bucaramanga. En el trayecto deben atravesar el Páramo de Berlín con temperaturas bajo cero. Mujeres, niños y niñas, adultos mayores, personas con discapacidad. Más de seis horas se tardan atravesando la parte más fría de dicho Páramo. Un río humano, generalmente de familias muy humildes, sometiéndose a innumerables riesgos pero con mucha esperanza de tiempos mejores. La organización Colombiana Mujeres y Futuro desarrolla un programa “Ruta de protección a mujeres, niñas y niños caminantes de Venezuela” así salvan vidas y disminuyen riesgo a las personas. Esta acción humanitaria es una de las tantas que desarrolla la sociedad civil en Colombia para brindar solidaridad efectiva a la población venezolana.