Cerca de las 7:00 a.m. de este viernes 14 de abril, un grupo de representantes trancó el acceso al puente internacional Simón Bolívar, para exigirles a las autoridades colombianas el restablecimiento del transporte escolar. La manifestación fue liderada por Carlos Lozano, presidente de la Asociación Civil Dignidad Sin Fronteras, la cual agrupa a padres y representantes de niños que estudian en Villa del Rosario y viven en San Antonio del Táchira. Son cerca de 2.600 menores que pasan a diario el trayecto formal a pie para llegar a las instituciones educativas, lo que representa un peligro, pues el tránsito de vehículos está activo desde el pasado 17 de febrero, y las aceras para los peatones son muy estrechas. Los representantes destacaron que alrededor del 78 % de los menores presenta doble nacionalidad; es decir, son venezolanos y colombianos, razón por la que el Estado neogranadino no puede negarles la protección. La idea, prosiguió el grupo, es que les den luz verde a las unidades y pasen hasta San Antonio del Táchira. “En el documento, propusimos que el punto de encuentro sea la plaza Bolívar”, remarcó Lozano en nombre de la asociación. Los niños que viven en Ureña y estudian en Cúcuta, ya cuentan -afortunadamente- con el transporte. Lo único que no se ha conseguido es que pase hasta el lado venezolano.

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