La Organización de las Naciones Unidas (ONU) estima que para finales de 2019 la cifra de migración forzada, producto del colapso económico y la emergencia compleja humanitaria, aumente a más de 5 millones. Pero, David Smolansky, coordinador del Grupo de Trabajo de la Secretaría General de la Organización de Estados Americanos (OEA) calcula que el éxodo pueda superar los 7,5 millones el año próximo.