En la frontera colombo-venezolana iniciar un emprendimiento se ha convertido en una de las salidas que ven más viables las personas al enfrentar dificultades económicas a causa del desempleo o para reconstruir sus proyectos de vida. En municipios como Cúcuta y Villa del Rosario, donde la migración venezolana ha impactado de manera significativa, especialmente en mujeres, la creación de pequeños negocios ya sean familiares o individuales, generan empleabilidad.
Por esto, la oenegé Ayuda en Acción a través de su estrategia de Integración Socioeconómica y Cultural (ISEC), con la que buscan combinar la formación, acompañamiento en procesos y capital semilla, en aras de fortalecer a pequeños negocios que se encuentran en comunidades vulnerables. Con dicho modelo se han beneficiado 863 personas, de las cuales el 90% son mujeres, Norte de Santander es uno de los departamentos donde se concentra la mayoría de personas que integran ese total.
Los sectores económicos de la región que integran la iniciativa, son los de calzado, confección y venta de alimentos.