Un reciente análisis de la Universidad Javeriana expone la crítica situación laboral que enfrentan los migrantes en Colombia, particularmente los provenientes de Venezuela, que representan el 88% de esta población en el país. Según el estudio, solo el 17% de los migrantes considerados como Población Económicamente Activa (PEA) cuenta con un empleo formal, lo que refleja una preocupante tasa de informalidad y desocupación.

El informe también pone de manifiesto la desigualdad de género en el acceso al empleo formal. Mientras que el 60% de los ocupados son hombres, solo el 40% corresponde a mujeres. Además, entre los migrantes sin empleo, el 65% son mujeres, lo que evidencia una situación de alta vulnerabilidad para este grupo.

Juliana Morad, directora del Observatorio de Derecho Laboral de la Universidad Javeriana, indicó que esta brecha es un reflejo de los desafíos que enfrenta la población migrante para integrarse al mercado laboral colombiano, donde las oportunidades son limitadas y el acceso a empleos dignos sigue siendo un reto.

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