La mañana del jueves en la frontera fue de fiesta y de integración, ciudadanos de ambos países bailaron, compartieron historias, dejaron mensajes e hicieron una catarsis a los dramas que viven día a día. A un costado del letrero bienvenidos a Colombia se presentaron agrupaciones binacionales que le rindieron un homenaje al folclor llanero y a la salsa. Todo ello en el marco del Día Mundial del Refugiado, recordado en la frontera por la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur).