Las organizaciones no gubernamentales Human Rights Wacht (HRW) y Amnistía Internacional (AI) pidieron, al Gobierno de Trinidad y Tobago, cesar las deportaciones de los venezolanos que han migrado a ese país, en un intento por escapar de la crisis humanitaria compleja que se vive en Venezuela. A través de una carta abierta, a la que se adosaron otros 20 grupos humanitarios, HRW y AI expresaron, al primer ministro Keith Rowley, su “honda preocupación” por los reportes que dan cuenta de la repatriación de “93 personas venezolanas, que fueron enviadas de vuelta a la grave emergencia humanitaria y de derechos humanos de la que huyeron”. Del mismo modo, las oenegés advirtieron que rechazar las peticiones de asilo o no preservar la integridad de los solicitantes es una práctica “contraria al principio de no devolución (non – refoulement), principio fundamental del derecho internacional”.

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