En medio de la grave situación de orden público que afecta a Norte de Santander, especialmente en la región del Catatumbo, el presidente Gustavo Petro lideró un consejo de seguridad extraordinario en Tibú. Tras cuatro horas de deliberaciones, el mandatario anunció la declaratoria del Estado de conmoción interior y la emergencia social para el departamento, medidas que serán oficializadas el próximo lunes en un consejo de ministros en la Casa de Nariño.
Las decisiones responden al alarmante panorama que enfrenta el Catatumbo, donde se reportan más de 30 personas asesinadas, cerca de 20 secuestrados, decenas de heridos y más de 300 desplazados. Estas cifras reflejan la intensificación de la violencia en una región históricamente marcada por la presencia de grupos armados ilegales.
Entre las víctimas se encuentran varios firmantes del Acuerdo de Paz, cuyos nombres fueron dados a conocer por la Defensoría del Pueblo. Estas pérdidas han generado una profunda preocupación en las autoridades y organizaciones defensoras de derechos humanos.