Entre 4.000 y 5.000 denuncias por violencia basada en género se recibieron en el último año en las cinco Comisarías de Familia que funcionan en Cúcuta, es decir, que cada una recepcionó entre 800 y 1.000, mientras que al mes están reportando entre 300 y 350 casos.
Así lo dieron a conocer los concejales Vanessa Arenas y Julián Rolón, integrantes de la Comisión Legal de la Mujer de la corporación municipal, que esta semana recibió a los representantes de las diferentes casas de justicia, quienes revelaron la preocupante estadística.
Rolón calificó como “alarmantes” estas cifras y manifestó su preocupación por lo que considera un incremento de los casos de violencias basadas en género en la ciudad.
Arenas también dijo que la situación es preocupante, pero más aún porque no existe una ruta clara de atención, esto en relación con la falta de una casa refugió del municipio que acoja a las víctimas de estas situaciones, sino que “seguimos dependiendo de los refugios que ofrece las ONG que nos apoyan”, dijo.
“Necesitamos que se prioricen recursos suficientes para garantizar refugios y casas de acogida que permitan salvar vidas”, apuntó Vanessa Arenas.
Igualmente, se solicitó a la Secretaría de Equidad de Género que apoye con capacitaciones al personal de las comisarías en resolución de conflictos y que, en colaboración con la Policía, se afiancen las labores pedagógicas y de difusión de las rutas de atención para los casos de violencia basada en género.