El 23 de noviembre de 2018, la primera sede de Mi vecino protector abrió sus puertas en La Parada. Aunque la decoración, el personal y las actividades coinciden con otros programas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), la particularidad de esta guardería es que está dirigida a niños venezolanos. Con este programa, el ICBF quería atender a los menores en el sector del puente internacional Simón Bolívar, que permanecían en las calles mientras sus padres trabajaban, mercaban o hacían trámites. Aunque la cifra parece pequeña, los 160 niños beneficiados por Mi vecino protector están a salvo de los peligros que podrían enfrentar en las calles y tienen la posibilidad de recibir atención necesaria para su crecimiento.