El alcalde de Ipiales, Amílcar Pantoja, encendió las alarmas ante la posibilidad de que el gobierno ecuatoriano expulse en los próximos días a un gran número de ciudadanos venezolanos, quienes serían dejados en la frontera binacional.
Según el mandatario local, la situación podría generar una crisis social y económica en la ciudad y en otros municipios del sur de Nariño.
“En algunos sectores sociales se comenta que se daría una expulsión de venezolanos hacia la frontera. Esto pondría en mayor dificultad a nuestra ciudad”, advirtió Pantoja, quien aseguró haber solicitado al Gobierno Nacional y a la Cancillería que adopten medidas preventivas para evitar un colapso en los servicios y en el orden público.
El alcalde afirmó que líderes comunitarios y ciudadanos ya han manifestado su inquietud, especialmente porque la inseguridad y la violencia han aumentado en los últimos meses en la región.