Aterrorizar a Norte de Santander se convirtió en tarea fácil para los Ejército de Liberación Nacional (ELN). El despliegue de múltiples acciones violentas que se extendieron en el Área Metropolitana de Cúcuta y en distintos municipios del departamento, así como en otras ciudades del país, la semana pasada cumplieron su objetivo y así lo constató este grupo armado ilegal ayer, en un comunicado. El primer hecho que reclamó el ELN fue el ocurrido la noche del domingo 2 de julio contra las instalaciones del Departamento de Tránsito de Villa del Rosario cuando los miembros de la Frente Nacional de Guerra Urbana (FGUN) activó un explosivo que provocó daños en la estructura, pero no dejó heridos.